Los matrimonios de hoy están pasando de moda rápidamente, como si fuera una pandemia la de los divorcios, todo por olvidar los detalles que cada uno de nosotros se comprometió a desarrollar en el santo estado matrimonial; matar el amor y la pasión de su “Mujer” es tan sencillo como esto:
Admire la belleza de todas, menos la de su propia mujer; comente con su amigos y compañeros lo bella que es su asistente y lo tremenda que es de buena gente, cuénteles que hasta el detergente de su ropa viene botando gente. Hable de la sonrisa que le da con lo blanco de su camisa, comente que sería ella una buena nodriza.
Mande mensajes de texto por cualquier pretexto, dígale si le reclama “púchica vos todo sacas de contexto”; hágase el macho, hágase el enojado como el empleado público que el salario no le han pagado, reciba llamadas de noche y de día no importando que a ella esto le cause una real pesadilla.
Promueva en su entorno la hipocresía y la doble moral, para usted como hombre se vea como sacado de un corral (mula); sea coqueto y cuentero, como solía ser su barbero. Vista como todo un Dandy, apretadito y delicadito para ver si le sale algún voladito en la calle; simplemente olvide todos los detalles.
Gaste todo su dinero en su Auto, y no piense jamás en la vida de los suyos pues es usted el mero mero del billuyo (dinero); jamás haga un presupuesto, esto es un simple pretexto de perdedores aburridos, de todas formas todos quedan barridos o endeudados y algunos hasta enlutados.
Jamás piense en las caricias, solo en el acto directo, es más es un favor es el que usted le hace; el de ella en ese sentido, acordarse. Llegue directo a la mesa y pregunte por su comida, si es necesario despiértela pues a las 11: PM ella ya está dormida, grite con prepotencia y luego de comer asuma demencia.
Finalmente hable mal de ella ante sus amistades, corra libre como solía hacerlo en otros corrales; denígrela con sus amigos, sí con ese grupo de resentidos, cuénteles que ella es aburrida y que usted esta buscando una salida. Pero de todo esto tenga en cuenta que el ignorante e impotente es usted, si con ella no es un hombre decente